En España hay casi 26 millones de casas en las que se vive día a día buscando crear un hogar cálido y confortable, adaptado a nuestras necesidades y en el que ser feliz. Y qué menos que proteger aquello por lo que tanto se trabaja por ello contratar un seguro de hogar es una gran herramienta de protección y garantías.
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Ahora que viene el frío y, en muchos casos, la nieve conviene tener en cuenta que el uso de las cadenas es una de las opciones más viables, sobre todo para días en los que nos pille por sorpresa o si no nos interesa poner unos neumáticos de invierno. Te enseñamos cómo se ponen, para que no te veas nunca con el manual en la mano y congelado de frío. 1. ¿Sirven para mis ruedas? Para cada tamaño de rueda hay unas cadenas, así que asegúrate de que las que has comprado se pueden montar sin problema en tu coche. Si cambias de coche o coges el de algún amigo o familiar prestado, prueba que encajan antes de salir casa. 2. Mejor con guantes Un par de guantes en el maletero no ocupan nada y nos harán un grato favor si tenemos que cambiar una rueda o, en este caso, poner unas cadenas. Podremos seguir rumbo a nuestro destino y con las manos limpias y sin heridas. 3. Practicar antes de que llegue la emergencia No está de más probar a colocar las cadenas algún día de mucho frío o que caiga una ligera nevada. De esta manera, cuando llegue el día no tardaremos más de lo necesario en montarlas. En nuestro garaje y sin frío se ve todo de color de rosa, pero bajo nieve y a grados bajo cero puede resultarnos de lo más agotador y frustrante no atinar a colocarlas bien. Tantos las cadenas como las fundas textiles que se han puesto de moda últimamente se montan en las ruedas motrices –las que son movidas por el motor-. 4. Usarlas con cabeza Las cadenas nos librarán de sustos en condiciones de nieve o hielo, pero no hay que confundirlas con los neumáticos de invierno –mucho más efectivos- o con los que se usan en competiciones y rallyes. No hay que pasar de 50 km/h y habrá que gestionar con cabeza los pedales del acelerador y el freno. 5. Quitarlas cuando sean prescindibles Cuando la nieve o el hielo no represente un peligro a la conducción habrá que retirarlas, sobre todo porque usadas fuera de sus condiciones óptimas pueden dañar las ‘gomas’. Las limpiaremos con agua y las guardaremos hasta la próxima vez que queramos usarlas. A continuación os ofrecemos un video del RACE donde nos explican con sumo detalle como debemos colocar las cadenas. Noticia extraida de: http://www.autopista.es
Video: http://www.race.es Los sistemas de retención infantil ‘low cost’ no son una buena opción si nos preocupa la seguridad de nuestros hijos. Más de la mitad de las sillas de menos de 70 euros suspende en los test de calidad. Noticia extarida de www.kelisto.es/seguros-coche/actualidad
El mediador de seguros es un profesional cualificado que actúa como intermediario entre las compañías aseguradoras y las personas. Ayudan a las compañías en la distribución de los productos que ofrecen y son el canal de comunicación y gestión entre vosotros y las aseguradoras. La seguridad propia y familiar son temas serios que no se delegan a cualquiera. De sobra es sabida la importancia de la contratación de un seguro, pero pocas veces se conoce cómo canalizar esta contratación de la mejor manera. Existen aún muchas dudas sobre cómo contratar un seguro, con qué compañías, cuáles son los productos más adecuados para cada caso y cómo sacarles el mejor provecho, cómo encontrar las mejores ofertas, qué dicen las letras pequeñas, cómo se gestionan las emergencias… y, también, si contratarlo o no directamente. El mediador cobra especial importancia en caso de siniestro para la resolución de conflictos entre el asegurado y la aseguradora. Por este motivo, si como tomadores de seguros estamos descontentos con la compañía de seguros que hemos contratado y deseamos presentar una queja o una reclamación, cual fuere su naturaleza, lo mejor que podemos hacer es hablar con nuestro mediador, porque él conoce perfectamente nuestra situación y puede convertirse en un buen interlocutor con la compañía de seguros. Un aspecto que antaño se mostró controvertido, pero que hoy en día no ofrece dudas, es el de los honorarios de los mediadores. ¿Qué me cuesta un mediador? Nada, no hay coste para el tomador del seguro, porque los mediadores reciben sus honorarios de los corretajes que les pagan las aseguradoras tras formalizar un contrato de seguro. Las principales ventajas de tener un mediador de seguros serían:
¿Tienes alguna duda sobre la figura del mediador de seguros? |